Pero efectivamente, siento miedo... o algo parecido al miedo. Pues después de tantas malas jugadas del destino me prometí no volver a caer en sus trampas... e iba tan, pero tan bien.
No sé que es lo que pasa y tampoco quiero saberlo. Sólo espero que se pase rápido muy rápido, y que por favor no siga creciendo. Definitivamente sería el colmo de los colmos.
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