No hay nada trivial

La gente creía que cuando alguien muere, un cuervo se llevaba su alma a la tierra de los muertos, pero a veces, algo malo ocurre, y acarrea una gran tristeza, y el alma no puede descansar en paz. Y a veces, sólo a veces, el cuervo puede traer de vuelta el alma para enmendar el mal.

domingo, 24 de febrero de 2013

Este cuento lo sé de memoria

Fue raro llegar a este lugar y darme cuenta de el tiempo que he estado sin escribir. Intenté buscar una respuesta ya que la falta de tiempo no corresponde. Mi mente concluyó que el temor de cierta manera me tiene tan atrapada que ni siquiera deseo desahogarme y eliminar pensamientos y sentimientos que recorren mi cuerpo por miedo a descubrir lo que está pasando conmigo. No lo hablo, no lo escribo, no lo saco de mí ya que no quiero asumir que todo está ocurriendo nuevamente. 
Anhelo tanto encontrar el freno de mi auto, porque no quiero seguir avanzando por este recorrido. Me espanta, y eso hace que actúe mal... que no haga las cosas bien y todo en mi mundo se salga de control. 
No entiendo, y no sé si algún día lo entenderé. ¿por qué este tipo de situaciones llegan a mi vida si yo jamás las pido? prefiero caminar sola, leer un libro, tocar armónica o simplemente hacer las cosas para mí y no con algún patético fin. 
¿Habrá alguna solución por ahí escondida? un remedio para olvidar que un día cualquiera comencé a sentir, o una forma de saltar este paso, y volver a concentrarme en mi camino. No sé, cualquier cosa... pues sé perfectamente lo que queda por ocurrir; Yo soñando estupideces por un buen tiempo. Arreglando las cosas para luego echarlas a perder, aceptando los pequeños regalos de la vida que antes de abrirlos ya desaparecen... encerrándome por las noches entre cuatro paredes atestadas de ilusiones, sentimientos, deseos, y falsas esperanzas que quedan ahí y al otro día despierto haciendo como si nada hubiera pasado por mi cabeza. Sonriendo ante las personas y ante mí misma para creer que ya todo pasó. Vueltas en círculos viciosos que me llevan siempre al mismo lugar. Obsesiones y disgustos por lo no logrado. Penas porque mientras estoy en esa rutina, la vida de quién provoca este tipo de cosas sigue avanzando perfectamente sin retroceder. Y etc... un sin fin de actitudes y acciones que van a quedar tarde o temprano en el olvido. Que después de un tiempo no entenderé qué fue lo que me pasó, y me arrepentiré de tantos segundos perdidos. Sin embargo, mientras eso no suceda yo sigo aquí cada noche y cada día recorriendo esa misma carretera y me desespera no saber cuándo llegaré a la parte final, cuándo volverá a ser todo normal, y mientras, simplemente no sé que hacer.

Long nights - Eddie Vedder