Pasó lo que no quería; el bloqueo, el poco ánimo, la desmotivación y un montón de factores mantienen a este lugar tan vacío. El único lugar donde realmente puedo llorar sin la necesidad de derramar lágrimas; donde puedo relatar y relatar, cómo es que ese pedazo de sangre dentro de mi llegó a oscurecerse tanto, cómo llegué a sentir tanto desprecio por el entorno, y todo eso sin oír nada, porque todo lo que oigo me molesta.
No sé qué sigo haciendo acá. Supongo que en realidad no me atrevo a abandonar esto, el miedo se transforma en mi guía y la aventura se convierte en un desconocido; al fin y al cabo es más cómodo pensar y escribir. Ahogarse en un pozo sin siquiera intentar salir, sin volar hacia ningún lado.
En qué minuto me dejó de importar todo, en qué minuto mi principal deseo comenzó a ser el olvido. Las cosas pasan, las familias se destruyen, las personas hacen daño, las parejas se separan, el sistema nos consume y esclaviza, nos hace odiarnos a nosotros mismos, por no alcanzar a ser quienes creemos que debemos ser. Pero aun así, me duele, y por ahora no quiero aceptar que todo está tan disfuncional.
Eterna inocencia - vientos del amanecer