Five seconds.

Es increíble como aumentan los latidos de mi corazón tras cada palabra,
cada si, cada no, cada respiración... tras cada delirio provocado por
un profundo cerrar de ojos... un simple paseo en auto puede pasar de
ser un tranquilo viaje a un trágico accidente, sólo que... suplantando
el choque peculiar, las cenizas de un cuerpo sin funcionamiento,
reemplazando el fuego que bordea las orillas de los objetos metálicos,
esta vez... es un accidente completamente diferente, si hay fuego claro
que lo hay, pero esta vez, proviene de lo más profundo de un cuerpo,
de el interior, una detonación interna que mantuvo intacto todo lo
que se ubicara al rededor, quedando sólo aquel cuerpo quemado y
desfigurado. No es posible concentrarme con aquel aroma en mis
narices, aquella pluma acariciando mi piel, escuchando esa voz tan
dulcemente ruda, y teniendo presente que las cosas no van bien...
aun que está claro que para mí si que van excelente. Cómo será posible
mezclar unos cuantos mundos, y así crear uno nuevo... con ingredientes
de realidad, ficción, maravilla, y mucho suspenso... Verte reflejado

en un ser que desconoces, y que no parece comportarse con uso de

razón, porque hace cosas que no están bien pero en el fondo son tan
arriesgados esos actos que elevan el nivel de adrenalina que hay en
tus venas. Fin de este intento, está bien, lo admito... no puedo,
simplemente me es imposible poder lograr que mis palabras se conecten
y tengan un mínimo de coherencia, porque estás acá, estás presente
y así no se puede, sólo queda cerrar una vez más los ojos y proyectar
el famoso día perfecto que aquel cigarro te debe.

Let it die - Foo Fighters.