Somos un imán.

Todo basado en una teoría, una experiencia lejana que decide ser

compartida para que los demás prueben su resultado... soy quien

tomará la prueba. Me repetí una y mil veces "Tus pensamientos

se materializan en objetos", esperando que mi mente reflexione

esas palabras, lo haré, estoy dispuesta a contradecirme de aquella

manera tan extraña, llevaré a cabo una opinión ajena por primera

vez en mi vida... dibujaré una linea, que divida al universo, en un

costado se ubicará la ley de atracción, y en el otro la ley de

contradicción, es decir, me volveré eficaz para poder recibir alguna

respuesta, la ley de atracción dice "Si lo ves en tu mente, lo tendrás

en tu mano"... también dice que lo semejante atrae lo semejante,

los pensamientos son magnéticos y tienen una frecuencia. Quizás

lo haya vivido sin darme cuenta, puede ser que más de una vez

inconcientemente haya afirmado aquella teoría... pero las dudas

accedieron a mi conciencia y dieron vida a mi nueva teoría, La

ley de contradicción, más que una teoría, podríamos llamarla

superstición, en fin... tus pensamientos atraen lo contrario de lo que

piensas, si dices "Me sacaré mala nota", te sacas buena nota, si

dices "Llegare tarde", llegas temprano... siempre cuando te lo

repitas con el máximo nivel de convencimiento, Somos un imán...

a pesar de atraer lo contrario o lo semejante, siempre atraemos

algo gracias a nuestros pensamientos. En fin... creo que ya mi

cabeza explotará tanto pensar en este asunto.

Pasando a otro tema, más sentimental... diré que tengo unas

sensaciones extrañas... es como felicidad de algo que aún no

pasa... ni siquiera es felicidad, más bien son esas estúpidas

cosquillas que te dan por una cierta razón, esa razón no está...

lo lógico sería llamar a esta extraña sensación "ansiedad" o

ilusión", también distintos tipos de aromas han hecho de las suyas

para hacerme viajar en el tiempo... recordar tantas cosas que hoy

en día no tengo y extraño... recordar como era yo en unos años

atrás, llegando a la conclusión de que cada año que pasa soy un

poco más infeliz, no es un pensamiento pesimista ni exagerado, es

la verdad... es un caso semejante al tiempo... supuestamente y

según yo cada año que pasa... es más rápido, hasta llegar al punto

de que un año se pasará en un día, el caso de mi felicidad es algo

parecida... el año anterior fui un poco más feliz que este, y el año

anterior al anterior fui otro poco más feliz... mi alegría, mi sonrisa,

mi ingenuidad, y mi optimismo, se fueron aminorando tras cada año...

quizás llegue a un punto extremo al igual que el tiempo. Hoy pensé en

seguir una teoría, lo haré, pero ante cualquier resultado, no me

rendiré, porque sé que cueste lo que me cueste encontraré esa maldita

cura... no moriré antes de probar, y tomaré en cuenta otro par de

palabras, la mayoría de las personas no consiguen lo que quieren,

porque dedican mucho más tiempo a pensar en lo que no quieren...

atrayendo así eso que no quieren con más continuidad. Lo aconsejaré.

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